10.- MEZCLAS
Terminada la grabación de diálogos en sala y revisadas las correspondientes
B.I. (Bandas Internacionales o M/E tracks) para asegurarse de que las
músicas y efectos están correctos, todo queda listo para la mezcla.
Hasta mediados de los años cincuenta, las mezclas se hacían sobre un
soporte óptico o fotográfico con el gran inconveniente de que no se
podía borrar y volver a grabar encima en caso de equivocación. A a partir
de esa fecha y hasta finales de los ochenta, se realizaban sobre un
soporte magnético: con este material se dio un paso de gigante porque
permitía que se borrase y se volviese a grabar.
Actualmente, todo está digitalizado y la mezcla se realiza sobre un
soporte de disco duro, contando con todas las facilidades para poder
borrar y volver a grabar cuantas veces sea necesario;, las nuevas tecnologías
que surgen constantemente están simplificando considerablemente la mecánica
de trabajo. Las innovaciones son continuas y esto al estudio de doblaje
le supone estar siempre al día, con el consiguiente desembolso económico
dado que una mesa de mezclas puede quedar obsoleta al cabo de muy pocos
años.
La labor del mezclador consiste en ir engarzando los diálogos con las
músicas y efectos, como si de una pieza de orfebrería se tratara. Indiscutiblemente,
la habilidad del mezclador es esencial para obtener un buen resultado.
En la sala de mezclas ("mixing room"), el técnico se acomoda en su mesa
de mezclas ("mixer") y ve desfilar en una pantalla la imagen conforme
él la va requiriendo. Mientras tanto, en la cabina, una habitación contigua
a la sala, el operador tiene las máquinas a punto, cargadas con la copia
de trabajo de la película ("workprint"), los diálogos grabados en sala
y la B.I. ( Banda Internacional - M/E track), y está a la espera de
las instrucciones del mezclador.
La mezcla se hace por bobinas ("double reels"); cada bobina consta normalmente
de dos rollos. El mezclador comienza su trabajo viendo, en versión original,
la imagen de la bobina a mezclar para percatarse de todos los niveles
y detalles de la banda sonora. Una vez visionada la imagen, la rebobina
y vuelve a proyectarla, pero dejándola muda, cambia el sonido original
por la mezcla de la versión doblada que en ese momento empieza a preparar,
y de este modo se inicia la mezcla.
Aquí empieza una labor de auténtica artesanía, y es una lástima que
tanto las fallidas como las verdaderamente logradas pasen desapercibidas.
Las mezclas desempeñan un papel muy importante en el doblaje de una
película pero, desgraciadamente, sólo una pequeña minoría valora el
excepcional trabajo que realizan los buenos mezcladores.
También hay bastantes películas cuyas mezclas se realizan en el extranjero,
en EE.UU. o Inglaterra principalmente. Metro-Goldwyn Mayer, hace años,
siempre las llevaba a cabo en Culver City y casi todas las películas
de Spielberg también se mezclan en EE.UU. En estos casos, los diálogos
grabados en sala se preparan ordenadamente, se confecciona una banda
de diálogos para mezclas ("mixing dialogue track") y se envía al laboratorio
donde va a tener lugar la mezcla. La banda de diálogos para mezclas
("mixing dialogue track") va acompañada de unos informes técnicos ("mixing
repports") preparados por el mezclador, en los que se especifica la
pista y el pie donde está el diálogo de cada uno de los distintos actores
así como los ambientes ("ad libs - ad libitum - crowds") correspondientes.
Las mezclas hechas en el extranjero y por un técnico que desconoce el
idioma de la versión doblada hacen un flaco favor al doblaje de la película:
si alguna palabra no se entiende bien o algún final de palabra queda
cortado, el técnico no cae en la cuenta por su desconocimiento del idioma.